Una madre china está angustiada porque su hijo nació con una espina bífida, un padecimiento congénito del desarrollo que deja un espacio en la columna vertebral, que creció más de 12 centímetros y pide una cirugía.
Sin embargo, doctores en Changshá, China, advierten que no pueden hacer nada por el bebé, llamado Nuo Nuo, ya que la protuberancia está conectada a su sistema nervioso y la eliminación dejaría un daño permanente.
El trastorno de Nuo Nuo, de cinco meses de edad, ocurre en uno de mil nacimientos, pero el crecimiento de esta gravedad es rara. (Publimetro)
